02 fevereiro 2006

MI LISTA DE VIDEOCLIPS

Si ayer en el rincón del elfo loco comenté cuales serían las películas-basura que más me gustaría ver, ahora comento los 5 videoclips más cachondos y terribles que he podido disfrutar.

1. Dame tu cariño de Camela. Ya solo el concepto – Camela en una Space Opera- es tronchante, pero además están esas cabinas con las fotos de No corras Papa, las iguanas gigantes que atacan a los protagonistas, la melena gitanaca embutida en el casco de astronauta, los tíos cantando mientras conducen naves sacadas de Star Wars… y todo dirigido por mi ídolo del momento J. A. Bayona. Sin duda, de lo mejor que se ha hecho por el videoclip de este país.

2. Satisfaction de Benny Benassi. Música rayante y chicas en bikini manejando maquinaria pesada. Es de lo más psicotrópico que he podido ver… y extrañamente fascinante. No tiene desperdicio, sobre todo el casting -¿Adonde fueron, a Private garrafón?- y esos delirantes planos a Cámara lenta. La demostración de que la música electrónica tambien puede ser buena, aunque no lo parezca.

3. Sabotage de los Beastie Boys. Esta es la inclusión artie de la lista. Una gamberrada perpetrada por Spike –ladrón de orquídeas- Jonze, parodiando a todas las series de polis de la historia, y sobre todo el reality-show yanki Cops. Debo admitir que fue el film que me reconcilió con el zoom… pero solo si son tan divertidos como estos.

4. Gay Bar de los Electric Six. El cantante disfrazado de Lincoln en calzoncillos y repetido por todas partes de la pantalla. Ya solo eso es divertido, pero cuando empiezan a tocarse y restregarse… eso es demasiado. De todas maneras, me quedo con el plano del ratón por el tubo. ¿Tiene algo que ver? No, pero queda chulo y lo metemos. Eso es profesionalidad.

5. Y por último... ¡Un videoclip de reggetón! No me importa cuál porque todos son iguales, pero aún así tienen algo que me fascina. Será por las letras rebosantes de ese machismo tan pueril; será por las bailarinas que solo saben mover esa parte de cuerpo; será por las joyas horteras y los movimientos de manos tipo Yo soy Sam... no sé exactamente que me gusta más... pero me encantan por ser la basura más grande y divertida que he visto jamás. Que no acabe nunca.